Las casas de apuestas siempre están a la pesca de usuarios que jueguen en ellas y, para eso utilizan distintos bonos, los cuales tienen múltiples variantes.
Estos bonos son un estilo de regalo que se da en forma de dinero, siempre y cuando los usuarios cumplan con determinadas condiciones.
Bono sin depósito:
Usualmente son de bajo valor, no hay necesidad de realizar un ingreso previo.
Habitualmente estos bonos los utilizan las casas de apuestas que son nuevas en el mercado para darse a conocer entre los apostadores.
Les regalan un pequeño importe a los usuarios que se registren en su casa y para sacar ese dinero deberán apostarlo un determinado número de veces.
En este caso, se le ofrece al cliente un extra adicional, siempre y cuando el cliente ingrese una cantidad de dinero.
Generalmente son un porcentaje del ingreso, el cual tiene un límite establecido por la casa.
Bonos de bienvenida:
Es el bono más conocido y utilizado en el mercado de las apuestas.
En este caso se ofrece una cantidad de dinero como regalo, una vez que haya realizado un primer ingreso.
Con respecto al importe, generalmente se da un 50% o el 100% del primer depósito que efectuemos.
Este sistema de bonos varía en función de cada casa de apuestas, pudiendo recibir un mínimo de 10€ hasta un máximo de de 250€.
Promociones puntuales:
Habitualmente, las casas de apuestas suelen realizar promociones especiales, las cuales generalmente coinciden con algún evento importante.
Por lo general, estas promociones consisten en que, si haces apuestas concretas al evento en cuestión, la casa te regala un bono y su importe, varía dependiendo de la promoción.
Para todos estos tipos de bonos es importante diferenciar los que son dinero real y los que son apuestas gratuitas (freebets). Según la casa de apuestas darán de uno u otro tipo, así que deberemos leer las condiciones del bono para asegurarnos.
Los bonos de apuestas de tipo Dinero real funcionan exactamente igual que el dinero que nosotros ingresamos, al ingresarnos el bono tendremos más dinero en nuestra cuenta.
Las apuestas gratuitas de tipo “Freebet” son distintas, con ellas solamente nos quedaremos el dinero que hayamos producido al apostarlos.
Por ejemplo, si apostamos una freebet de 100 € a una apuesta a 1.50 y acertamos, el dinero que llegará a nuestra cuenta será, los 50 € de beneficio que hayamos obtenido, en lugar de los 150 € que llegarían si hubiéramos hecho una apuesta con dinero real.